Desde que tengo memoria Osvaldo recorría las calles. Su voz incofundible se delizó por las venas de Río Gallegos. Su tono marcado por la agudeza y gravedad de la experiencia y la sencillez de la vocación nadie lo pudo apagar.
Lluvia, viento, frío, calor y escarcha no fueron impedimento para su grito. El viento, su fiel compañero, fue su amplificador natural. Osvaldo andaba... y cómo andaba, andaba y caminaba, andaba y comunicaba. Siempre con su sonrisa frente al volante, con su andar despacio y con su volumen fuerte. La tecnología amenazó con apagar su corazón, esa propaladora que llevó su marca registrada tantos años y que se convirtío en hija riogalleguense. Pero esos altoparlantes se arraigaron a las raices de la ciudad cordial, y su voz se pegó a cada árbol, a cada calle y a cada vereda. Osvaldo siempre estuvo, ya sea un circo o una carrera, ya sea un recital o un partido de fútbol. El sabía todo antes de tiempo, él se encargaba de contarlo, de decirlo, de reproducirlo y de darle vida. Si Osvaldo no lo contaba, no existía. Quizas por su propia vocación y por su amor a la ciudad acompañó cada marcha, cada acto popular, le dio su voz a todo evento que lo necesitó.
Desde que tengo memoria Río Gallegos tenía un eco, su voz. Osvaldo nos dejó, pero no se irá. La camioneta amarilla seguirá recorriendo la capital y su voz bajará con el viento. Ahora nos mira desde arriba y su propaladora se escuchará más fuerte.
En honor a Osvaldo Pérez.
Lluvia, viento, frío, calor y escarcha no fueron impedimento para su grito. El viento, su fiel compañero, fue su amplificador natural. Osvaldo andaba... y cómo andaba, andaba y caminaba, andaba y comunicaba. Siempre con su sonrisa frente al volante, con su andar despacio y con su volumen fuerte. La tecnología amenazó con apagar su corazón, esa propaladora que llevó su marca registrada tantos años y que se convirtío en hija riogalleguense. Pero esos altoparlantes se arraigaron a las raices de la ciudad cordial, y su voz se pegó a cada árbol, a cada calle y a cada vereda. Osvaldo siempre estuvo, ya sea un circo o una carrera, ya sea un recital o un partido de fútbol. El sabía todo antes de tiempo, él se encargaba de contarlo, de decirlo, de reproducirlo y de darle vida. Si Osvaldo no lo contaba, no existía. Quizas por su propia vocación y por su amor a la ciudad acompañó cada marcha, cada acto popular, le dio su voz a todo evento que lo necesitó.
Desde que tengo memoria Río Gallegos tenía un eco, su voz. Osvaldo nos dejó, pero no se irá. La camioneta amarilla seguirá recorriendo la capital y su voz bajará con el viento. Ahora nos mira desde arriba y su propaladora se escuchará más fuerte.
En honor a Osvaldo Pérez.
8 comentarios:
Osvaldo Pérez...
¡PRESENTE... AHORA Y SIEMPRE.!
¡PRESENTE... AHORA Y SIEMPRE.!
¡PRESENTE... AHORA Y SIEMPRE.!
"Cuando mi voz calle con la muerte, mi corazón te seguirá hablando."
Rabindranath Tagore (1861-1941) Filósofo y escritor indio.
Osvaldo Perez:
Gracias por permitirme conocerte.
Gracias por tu acompañamiento permanente.
Gracias por tu ejemplo de honestidad y hombria de bien.
Gracias por su "Compromiso Social".
GRACIAS MIL GRACIAS OSVALDO!!!
Acompañamos a toda tu familia.
jea
Un fuerte abrazo a toda la familia de Osvaldo. No se fue, se mudó a un mejor lugar desde donde será nuestro vocero.
OSVALDO, Gracias, aquel GRACIAS que no te pude decir.
Gracias por tu compromiso con los docentes, apesar de todos los aprietes y quita de contratos, por haber optado acompañarnos.
Nuestra Lucha fue tu lucha.
Ahora estas en un lugar cercano a Dios. Con vos tenemos asegurada la intercesión.
Mi solidaridad y acompañamiento en la oración a la Familia Pêrez.
gracias osvaldo perez por todos lo que dejastes aqui en la tierra tu honestidad y la de ser de una persona que la pelaeba en la calle un sentido de pesame a la famillia y osvaldo siempre te voy a llevar en mi corazon chau amigo
Tuve el privilegio de conocerte... en las marchas... alentando siempre nuestra lucha... y dándole la trascendencia que tiene hoy... nos tenìas fé... y no te vamos a defraudar...
Siempre cauto... nos enseñaste a expresarnos desde la inteligencia... y no desde las vìceras... porque de hacerlo asi.. nos decìas... les dàbamos letra para que nos pegaran.. POR ESO DEJASTE TU ESPÌRITU EN NUESTRA LUCHA... DIGNA... RESPETUOSA DE LOS IRRESPETUOSOS... GRACIAS POR PRIVILEGIARNOS CON TU ESPÌRITU.
Personas como Ud. son de las que pasan por nuestras vidas y, aunque sea por un instante, dejan huellas que perduran, como su sonrisa, su caballerosidad, su bondad, su solidaridad, y cuantas cosas más ha impresionado en cada uno de los que lo hemos tratado.
Gracias don Pérez!!! Soy de las que cree que las personas como Ud no se van, nos siguen acompañando siempre!
Cada 15 de Septiembre irá junto al Señor y la Virgen del Milagro como siempre.
Y en cada marcha, sentiremos su presencia y su afecto.
Lo buscaré en una estrella, allí estará junto a los seres buenos que nos dejaron!
Un abrazo a su familia.
Gracias flaco por no ser obsecuente. Quizas para muchos es mas facil ir para donde va la corriente. Pero vos eras diferente. Preferiste ayudar a los desprotegidos, pelear por la DIGNIDAD, Nunca vendiste lo que pensabas. Muchas veces trataron de sobornarte, de romperte contratos, ¿pero sabés que pasa? El prestigio que vos lograste durante todos estos años en tierra santacruceña, no lo tiene ninguno de "estos que dicen que nos representan"...
Tu imagen, Tu voz, siempre estará en nuestros corazones...
Diana
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